OPINIÓN

Más motivos para votar diferente

urna

Aunque soy muy consciente de que las personas votamos más por los dictados del corazón que por el razonamiento y así lo he dicho en más de una ocasión; intentaré dar más datos reales, esta vez económicos, para que los ciudadanos que lean estas líneas puedan escoger y votar en consecuencia.

No hablaré de los gravísimos escándalos de corrupción que afectan al PSOE. Estos ya por sí solos deberían decantar la opinión de las personas decentes ya que son una catarata que el sanchismo y sus socios quieren detener y desviar con vasitos de plástico.

Pero no, esta vez solo me basaré en datos económicos objetivos y que cada cual saque sus conclusiones de si se puede o no seguir confiando el timón del país a los partidos que nos gobiernan ahora.

Empecemos por el paro. En España el índice general es del 11%, el peor de la Unión Europea. El paro juvenil se eleva al 25'6%, con mucho, el peor de todos los países de la Unión Europea.

La deuda nacional se ha multiplicado por tres desde la llegada del PSOE al poder y la cifra en euros es escandalosa y la más alta de toda la historia de nuestro país.

La productividad nacional es la misma de hace veinte años con lo que hay pocas expectativas de mejora.

Por contra, la recaudación estatal ha aumentado alarmantemente desde la subida al Gobierno del PSOE y SUMAR. Veamos datos objetivos:

               -La recaudación por el IVA ha aumentado un 9'6%.

               -La del impuesto de sociedades un 30'18%.

               - La del IRPF un 30'6%.

Si hablamos del principal problema nacional, es decir, si hablamos de la vivienda podemos ver como desde la aprobación de la Ley de la vivienda defendida a ultranza por el Gobierno, los precios de la vivienda de alquiler se han encarecido un 24% y la disponibilidad de viviendas ha disminuido un 17%.

La cesta de la compra tampoco sale bien en la foto. Resulta que en los últimos diez años el índice de precios al consumo se ha incrementado en un 25'3%.

Y si hablamos de salarios citaremos que el 19% de los trabajadores no llegan a la cifra de 15.000€ /anuales.

En resumen, los salarios no suben y los impuestos se disparan. Mala señal para la clase trabajadora a la que el Gobierno dice defender.

De hecho 12'5 millones de españoles viven en la pobreza o en riesgo de exclusión social.

Y si hablamos de los servicios públicos a los que dicen defender ante las especulaciones de les entidades privadas, la ciudadanía puede aportar mucha información de cómo lo viven a diario:

               -No se recuerdan en nuestra historia reciente tantas incidencias y averías en los trenes de cercanías o de largo recorrido como ahora. Los trabajadores sufren  retrasos, anulaciones y accidentes. Y eso casi a diario Tampoco los aeropuertos se lucen en su funcionamiento, dejando nuestra fama entre los turistas, a nivel de país tercermundista.

               -Los centros de salud y hospitales están colapsados. Las listas de espera son interminables y la atención ha dejado de ser personal para ser regulada por minutos por consulta. Cualquier persona que se acerque a un CAP o hospital lo sabe y lo sufre.

               -Los niveles académicos de nuestros niños y jóvenes están por los suelos y a la cola de Europa. Los resultados obtenidos en las pruebas internacionales de evaluación deberían hacernos enrojecer de vergüenza. Los padres están consternados al ver a sus hijos sin conocimientos básicos como la lectura y la comprensión lectora, la escritura y la ortografía, el cálculo o la mínima cultura general. Y me consta que no es culpa de los docentes que lo dan todo a contracorriente contra todo y contra todos.

               -El Estado del bienestar se resiente. No llegan las ayudas a la dependencia y los parches de los bonos de educación y otros que el Gobierno difunde, son armas electorales más que herramientas eficaces de equilibrio social.

               -La juventud ve poco futuro en nuestro país y se lanza a la aventura marchándose al extranjero. Los padres vemos con preocupación cómo y porqué deben marcharse sin poder hacer nada.

               -Si el Estado sigue endeudándose se pondrán en peligro las pensiones. Las campañas interesadas del miedo que anuncian un apocalipsis para los pensionistas si accede al Gobierno la derecha, deberían replantearse en la dirección contraria. A mayor deuda más peligro para los que perciben una pensión.

Y a todo esto el Gobierno va alardeando de pequeños triunfos (cortinas de humo) afirmando que la economía va "como un tiro". Pero en cada casa de gente humilde se vive lo contrario.

La desigualdad entre el relato que nos venden y la realidad aumenta cada día.

 Y a los ojos y en la responsabilidad de todos está el verlo, el valorarlo y en decidir cuál es el mejor camino para una España y una Cataluña del futuro.