¿Tampoco se acordará Pedro Sánchez de Paco Salazar? La amnesia preventiva más famosa de España

El abrazo entre Pedro Sánchez I (el olvidadizo) y Paco Salazar. Foto RRSS.

A este paso, en España vamos a tener que estudiar la memoria de Pedro Sánchez como fenómeno paranormal. No por su brillantez, sino por su capacidad anticipada de olvidar todo lo que pueda resultar comprometedor. Una especie de amnesia preventiva que se activa antes incluso de que el problema llegue a su despacho.

Ahora la pregunta es, ¿llegado el caso, tampoco se acordará Sánchez de Paco Salazar, su asesor personal? Personal, sí. De esos que están en la agenda, en los viajes, en las fotos, en los preparativos, en los pasillos… Vamos, un fantasma en Moncloa del que, por lo visto, en cualquier momento no quedará ni el recuerdo.

La escena promete convertirse en clásico:
—Presidente, ¿recuerda a Paco Salazar?
—¿Paco quién? ¿Salazar? ¿Ese trabajaba aquí?

Todo apunta a que, llegado el caso, la respuesta presidencial será la de siempre: una mirada al infinito y un “no tenía constancia”. La fórmula que lo mismo sirve para Koldo, para comisionistas varios, para intermediarios de mascarillas… y ahora, probablemente, también para el asesor que ha tenido literalmente al lado.

El verdadero misterio ya no es quién hizo qué, sino cómo el presidente consigue olvidar a la gente que tiene a dos metros, pero recordar sin pestañear cualquier frase de sus discursos.

España, al final, se divide entre quienes creen en la independencia judicial, quienes creen en la regeneración democrática… y quienes creen que la amnesia de Sánchez es un superpoder.