El día del desembarco de la derecha en Extremadura, el día D, pronostica una victoria que roza la mayoría absoluta del PP (marcada por esos 33 escaños venerados por la gente de Feijó), que pasaría de los actuales 28 diputados a una horquilla que va de los 30 a los 32, rozando esa mayoría. A su vez, todas las encuestas reiteran el porrazo histórico del Psoe de Gallardo que bajaría de sus 28 diputados actuales hasta una horquilla que les da entre 20 y 22. Estos números, junto a un máximo de 4-6 diputados para la izquierda comunista de Unidas Podemos, convierten el voto de toda la izquierda y la suma del mismo en absolutamente irrelevante. Vox será el otro gran agraciado al pasar de 5 a 9-12 posibles diputados, aunque su alegría puede quedar mermada si se confirman los números de Guardiola. Cosa curiosa.
En todas esas sumas/restas se concluye que el PP está a punto de poder gobernar en solitario sin necesitar el arsénico (o cicuta dependiendo del día) de Vox, lo que convertiría al cuadro de Abascal (porque como es normal en esa formación nadie conoce al que se presenta pues solo importa el líder) en prácticamente irrelevante al perder la capacidad estratégica de “ahogar” al enemigo (que curiosamente no es la izquierda si no el PP) y extorsionarlo hasta hacerle llorar de desesperación.
O acaso, ¿los muchachos de Abascal se atreverían a boicotear a un PP con mayoría suficiente y con más diputados que toda la izquierda junta? ¿Serían capaces? Y, lo que es más importante, ¿cómo podría justificarse una actitud tan macarra ante un electorado que vota mayoritariamente a otro partido, por cierto, también de derechas y del que quieren extraer su voto? Difícil de explicar, ciertamente.
Recordemos que las elecciones extremeñas se han adelantado porque PP y Vox no han conseguido alcanzar acuerdos. Sin embargo, en ese momento la aritmética parlamentaria castigaba a peperos y beneficiaba a Vox y de tanto estirar la cuerda provocaron el adelanto electoral. Si los extremeños votan el domingo algo semejante a lo que dicen los sondeos de las últimas semanas, los parámetros cambian completamente y quien se queda con pocos argumentos de extorsión, salvo que sólo pretendan la revolución total, es el partido de Abascal. Vamos, que no los veo votando lo mismo que los imputados de Sánchez si el PP tiene más diputados que PSOE y toda la izquierda junta…
Además, es bueno recordar que, en menos de dos meses, volverán a enfrentarse a otro Miura como son las elecciones adelantadas, por el mismo motivo y causa, en Aragón. Así comenzó Ciudadanos en su momento y duró menos que un caramelo en la puerta de un cole….