O el CDU se reafirma en los valores que hicieron grande a Alemania -soberanía, meritocracia, seguridad y realismo económico- o estará condenado a la irrelevancia
El mal de no lograr aprobar un presupuesto no es ya de derechas o de izquierdas. O de independentistas o de constitucionalistas. Es un problema de políticos nefastos